Un trío caliente con mi instructor de fitness y un amigo, seguido de sexo anal intenso en el espacio

Había estado luchando por apegarme a mi rutina de fitness cuando mi amigo sugirió traer alguna motivación extra.Entonces, cuando mi suegro ofreció sus servicios, estaba más que ansioso por aceptar.El plan era simple: mi amigo se unía a nosotros para un entrenamiento, y luego todos cambiaríamos al dormitorio para una acción más intensa.Cuando comenzamos nuestro trío caliente, mi amigo se hizo cargo, explorando hábilmente cada centímetro de mi cuerpo.Sus manos recorrían libremente, trazando las curvas de mis grandes y naturales tetas y la redondez de mi culo.Podía sentir su deseo construyendo, reflejando el mío.Pero la verdadera diversión comenzó cuando decidimos llevar las cosas al siguiente nivel. Con la ayuda de mis amigos, empujamos los límites del placer, explorando lo más profundo del sexo anal.La experiencia fue diferente a todo lo que había sentido antes, y me dejó deseando más.Avance rápido unos años, y ahora me encuentro recordando ese fatídico día.El recuerdo todavía me estremece la columna, un testimonio del encuentro salvaje y apasionado que cambió mi vida para siempre.